
Nuestra miel
Atendemos personalmente todas nuestras colmenas, empezando por la formación de nuevas, a partir de núcleos de seis cuadros que cogemos de colmenas seleccionadas por su fortaleza, la fertilidad de su reina y su abundancia de cría y miel.
Catamos cada colmena en el momento en que la miel está en su estado óptimo de maduración.
La extracción y envasado los hacemos de forma manual, con los máximos controles de higiene.
Mantenemos la miel a una temperatura controlada para evitar que sus enzimas se desnaturalicen.
Hemos diseñado nuestra planta de extracción y envasado de modo que no necesitamos utilizar bombas para el trasvase. Lo hacemos por gravedad, para evitar que los cristales naturales del azúcar pierdan su estructura.
Nuestra actividad está orientada a obtener una miel de la máxima calidad, sin alterar el excelente producto que las abejas preparan.
Para ello, sólo tenemos las colmenas a las que podemos dedicar toda nuestra atención.
Nuestra producción es, pues, necesariamente limitada.
La cantidad no es nuestro objetivo. Mantener la máxima calidad, sí.